Aula Virtual
El término “aula virtual” fue utilizado por primera vez en la década del 80 por Roxanne Hiltz, quien la definió como “el empleo de comunicaciones mediadas por computadoras para crear un ambiente electrónico semejante a las formas de comunicación que normalmente se producen en el aula convencional”. En función a esto, se puede definir al aula virtual como un medio a través del cual se puede brindar educación sobre todo tipo de contenidos, mediante una interacción constante entre sus participantes, pero sin la necesidad de estar compartiendo un mismo espacio físico.
Con esta modalidad, se busca reproducir la experiencia de la educación presencial, mediante un ordenador. De esta manera, el alumno puede leer el material de estudio, formular preguntas, resolver consignas, entregar trabajos e interactuar con docentes y otros alumnos directamente a través de la plataforma.
Gracias al auge de la educación a distancia y a las nuevas tecnologías y formas de comunicación, el aula virtual es una parte esencial del cambio en el paradigma de la educación acontecido en los últimos años. El aula virtual más que una forma diferente de enseñanza, es un modelo educativo innovador en constante avance.
El aula virtual presenta ventajas e inconvenientes, el mayor de todos los inconvenientes se encuentra a la hora de efectuar la formación práctica. Hoy en día, todavía no es posible suplir las horas de formación práctica necesarias en cualquier disciplina en la que sea necesaria la interacción directa como puede ser en medicina, odontología, enfermería o en la formación práctica de un fontanero o un mecánico. Como ejemplo, no es posible sustituir la formación práctica de un máster de estas características para especialización en implantología dental con ninguna tecnología actual que se pueda prestar online.
¿Qué formas de aulas virtuales existen?
Existen tres modalidades que pueden adquirir las aulas virtuales de acuerdo al tipo de servicio de comunicación que utilicen.
Una de ella es por medio de servicios sincrónicos, que permiten enviar o recibir mensajes entre personas que deben estar presentes en el mismo momento para que la comunicación pueda efectuarse, aunque no necesariamente en el mismo espacio.
Dentro de los servicios sincrónicos podemos encontrar, por ejemplo, videoconferencias, la cual permite que varios usuarios puedan mantener una conversación en tiempo real, a través de la transmisión vía internet de videos, sonidos y textos. Por medio de una videoconferencia puede realizarse la demostración de un producto, una capacitación, una reunión laboral entre empleados que se encuentren en distintos sitios geográficos, anuncios importantes, entre muchas cosas más.
Otro ejemplo de servicio sincrónico son los chats. Esta modalidad, conocida también como cibercharla permite la interacción de personas mediante la comunicación escrita. El chat permite formar una comunidad virtual compuesta por personas que comparten discusiones, actividades, intercambios de material, a fin de contribuir al proceso educativo. El chat puede requerir de un horario puntual para la comunicación o bien puede estar abierto las 24 horas.
Los servicios asincrónicos en cambio, permiten la interacción entre los participantes sin necesidad de que estén presentes al mismo tiempo, por ejemplo, a través de e-mails, foros de discusión, páginas web, etc. Gracias a este tipo de servicios es posible la educación a distancia, ya que el alumno tiene disponible el material de estudio en todo momento y sin limitaciones de espacio físico, horario laboral, etc.
Un ejemplo de servicio asincrónico es la comunicación vía mail, a través del cual pueden enviarse archivos de textos, imágenes, videos o gráficos. Es frecuente que, en las aulas virtuales, haya una o varias casillas de correo electrónico para que los participantes puedan realizar consultas.
Y finalmente, mediante la combinación de servicios sincrónicos y asincrónicos surge la tercera modalidad, que es el Método B-Learning, con el cual se hace posible tanto la capacitación presencial como la educación online o a distancia. Es una forma más flexible de educación porque no tiene limitaciones de horario y más efectivo porque estimula la comunicación en todo momento. El B-Learning implica utilizar herramientas de comunicación virtual, como foros o correos electrónicos, videoconferencia, webinars, documentos descargables desde cualquier dispositivo, etc. Hoy en día las instituciones educativas secundarias y universidades adhieren cada vez más a este método, que permite además usar el sistema de flipped classroom, es decir, los alumnos pueden realizar sus trabajos desde el aula virtual y acceder al material de estudio desde su casa y luego, en las clases presenciales poner en práctica los contenidos.
¿Cuáles son los beneficios que ofrecen?
– Permiten una mayor flexibilidad horaria. El acceso puede realizarse a cualquier hora, por eso el estudiante tiene la posibilidad de administrar su tiempo de la manera que le resulte más conveniente. Los docentes por su parte, también se ven beneficiados porque pueden planificar las clases, subir el material, realizar correcciones y demás tareas en función a su agenda, sin el compromiso de horario que exige la educación presencial.
– Permite una comunicación constante entre docentes y alumnos mediante foros de discusión. Como se explicó anteriormente, no es necesario que los usuarios estén conectados al mismo tiempo. De esta manera, el intercambio de información y materiales de estudio se da en todo momento.
Algunas aulas virtuales incluyen también chats en vivo, ofreciendo la posibilidad de resolver cualquier duda o inconveniente en el momento.
– El coste económico es menor, dado que no es necesario trasladarse para poder asistir a las clases, alquilar salones o equipos de proyección, gastar en servicios de limpieza, etc. Todo esto permite que los docentes puedan ofrecer un precio más bajo y captar más alumnos, con lo que, ambas partes se ven beneficiadas.
– Es sustentable, en sentido que el alumno no necesariamente debe imprimir todo el material de estudio, ya que puede almacenarlo en el dispositivo electrónico que esté utilizando.
– Fácil acceso para un gran número de personas. Generalmente, los cupos suelen ser amplios e incluso ilimitados, gracias a que no se depende de contar o no con un espacio físico lo suficientemente grande.
– Mejor accesibilidad desde cualquier dispositivo electrónico. A la hora de diseñar un aula virtual, se tiene en cuenta todo lo necesario para que sus usuarios puedan acceder a la misma, sin necesidad de requerir mucha memoria y espacio en el disco de su dispositivo.
A pesar de todas estas ventajas, el aula virtual no se plantea como un sustituto de la educación tradicional, sino como un modelo más de enseñanza orientada a otro tipo de público. Incluso, muchas veces el aula virtual es utilizada como complemento de la educación presencial. Por ejemplo, a través de ella puede informarse cambios en los horarios de las clases, subir material de estudio adicional, etc.
